martes, 22 de enero de 2013

AVEIRO Y SU RÍA




Como os he explicado, in sito, es la Capital, por excelencia, de la Ría. Es una de las ciudades más atractivas del litoral portugués. En ella deja sus aguas el río Vouga hasta encontrarse con el mar. 





La Ría se abre en tres canales por la cuidad: el de las Pirámides que se extiende hacia el canal Central, el canal de San Roque, y el canal de los Santos Mártires (o del Paraíso). Por los que hemos navegado a bordo de uno de los “moliceiros”, un barco de extraña forma, con dibujos sugestivos y alegres colores: antes llevaban un gran mástil y vela. En algo se parecen a los barcos de nuestra Albufera, ambos son de fondo plano. 



Solamente no fuimos hasta las dunas de São Jacinto. Pero lo comenté con vosotros durante el trayecto en el barco, pues fue donde hice la mili, allí existía un Base Aérea: inicialmente de la marina, con hidroaviones.





Dicen que Aveiro fue fundada en los tiempos del emperador romano Marco Aurelio.
D. João I (1383-1433) donó la población a su hijo el infante D. Pedro quién ordenó la construcción de sus primeras murallas. Más tarde, D. João II (1481-1495), la cedió a su hermana, la Infanta D. Joana.
En el s. XVI, el desarrollo de la industria de la sal, de la agricultura y de la pesca. Sin embargo, en el Invierno de 1575, fuertes tempestades destruyeron el profundo canal por donde transitaban los grandes navíos que atracaban en Aveiro, destruyendo el comercio marítimo, la pesca y la actividad salinera.





En el s. XIX fue construida la Barra Nova, un ancho canal con cerca de 264 m de anchura y entre 4 y 6 de profundidad, que abrió la Ría al mar recuperando la fuente de la vida y supervivencia de la región.


Estuvimos paseando por el centro, os he invitado a ovos moles. Fuimos al mercado del pescado, quanta variedad y que calidad. 
Os sugerí que os fijaseis en las aceras, todas con piedrecitas de colores, la famosa calzada portuguesa: una mezcla de piedras de calcáreo y basalto. 




Después seguimos andando hasta el Convento de Jesús, hoy Museo de Aveiro, por cierto muy bien equipado y con piezas destacables.





Quiero que recordareis del Convento de Jesús el interior de la iglesia,
el notable trabajo de talla dorada y las paredes forradas con paneles de azulejos se ven seis lienzos representando momentos de la vida de Santa Joana Princesa, hija del Rey Afonso V y hermana de Juan II.



Así como el sepulcro de Santa Joana, pieza de notable ejecución con finísimas incrustaciones de mármoles italianos de diversos colores. Tan sólo en 1711 se depositaron las cenizas de la Infanta, a la que Aveiro dedica una fiesta religiosa el 12 de mayo (festivo municipal), efeméride de su muerte.


Hasta la vista ... Aveiro y su Ría...



















viernes, 4 de enero de 2013

VIRIATO





No he querido que nos marcháramos de Viseu sin antes pasar por la “Cava de Viriato”, de formato octogonal. No todos los estudiosos son afines con este estudio arqueológico de los posibles orígenes de "Lusitânia".


Siempre me he sentido impresionado por este gran personaje de la historia pero nunca le había rendido un justo homenaje. Estábamos en Viseu y el momento era el más propicio. Si, veníamos de Valencia y un gran escultor de la tierra, Mariano Benlliure, ha sido el artista que, con su creatividad y bien hacer,  ha dado al mundo una imagen bastante acorde con todo lo que he leído de Viriato.



No os voy a contar de nuevo todo lo que ya os he dicho sobre Viriato pero si recordaros algunos detalles, mientras contemplamos la obra de Don Mariano.



No se conoce con exactitud los orígenes ni la procedencia de Viriato, pero los estudiosos lo sitúan entre el Duero y el Tajo, a lo que se ha llamado los Montes Herminios, o sea entre la sierra de la Estella y la sierra de Francia.



El autor que más me ha acercado al gran líder que fue Viriato, ha sido João Aguiar en su libro “Viriato - Iberia contra Roma”. Un excelente trabajo novelado de la iberia de los años 150 a los 75 a.d.C. Define a Viriato como la gran pesadilla de Roma. Existe una edición en castellano.



Ocasionó la célebre guerra de Numancia para derrotar a los Romanos. Fue el gran defensor de un mundo que muria asfixiado por el poderío romano.



Viriato ha corrido detrás de os romanos por todo lo que es Portugal del Duero para bajo y parte de España, llegando hasta la Bética y desde allí a tierras de Valencia.


Fue asesinado por Audax, Ditalco y Minuro, mientras dormía. Cuando fueron por la recompensa Servilio Cepión los mandó matar haciendo celebre la frase – “Roma no paga a traidores”.


Tautalo fue el jefe lusitano que comandó la fracasada expedición contra Sagunto, después de la muerte de Viriato.